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sábado, 3 de diciembre de 2016

INTERVENCIÓN PREVENTIVA Y RESTAURADORA (COLABORACIÓN)



La metilcelulosa es un derivado de la celulosa utilizado en numerosas aplicaciones de restauración, sobre todo en las operaciones de adhesión de papel y materiales similares (por ejemplo textiles). Su principal propiedad es la solubilidad en agua fría lo que la hace reversible, además de tener pH neutro, ser estable, no afectarle el frío o el calor. Su calidad de reversible permite que se pueda retirar fácilmente sin dañar el documento. Junto con los engrudos (de harina de avena, trigo, arroz), féculas y almidones es de los adhesivos más usados en la restauración.

1. Metilcelulosa (pasta)

El ingrediente principal en la mayoría de los adhesivos comerciales para uso en papel pintado para paredes o de colgadura es la metilcelulosa, y es aceptable para propósitos de conservación si se usa en su forma más pura. Se puede comprar en casas comerciales que venden productos de conservación en forma de un polvo blanco.

Mezcle una cucharadita rebosante con metilcelulosa con 1/2 taza de agua destilada y déjela reposar por varias horas. Dilúyala a la consistencia deseada con agua destilada. La pasta de metilcelulosa no es tan fuerte como el engrudo de almidón, pero sirve para adherir objetos de tamaño moderado. El adhesivo de metilcelulosa se mantiene bien durante varias semanas y no requiere conservativos ni refrigeración.

La pasta de almidón no se recomienda en climas tropicales porque atrae insectos que pueden producir daños en colecciones donde hay documentos o libros.
2. Cómo reparar desgarros usando pasta de metilcelulosa únicamente

Cuando el desgarro tiene bordes fuertes, que están superpuestos y que son obviamente borde superior e inferior, el aplicar la pasta a los bordes puede ser suficiente para unirlos. Use un pincel fino, micro espátula o aguja para aplicar la pasta a los bordes superior e inferior y presiónelos juntos. Cubra la reparación con material no adherente y presione los bordes con una plegadera.

Recuerde que es mejor trabajar de la base de la reparación hacia el borde exterior de la hoja. Limpie cualquier exceso que se haya salido de la reparación. Tome nota de la cantidad de exceso y trate de usar menos en la siguiente reparación. Siempre trate de usar suficiente pasta: ni mucha, ni poca. Seque la reparación bajo material no adherente y pesas que la mantengan plana.

Cuando la reparación esté seca, enrosque el papel alrededor de la reparación para asegurarse que los bordes estén bien pegados. Si hay bordes sueltos, aplique más pasta y seque bajo un peso. Si la hoja se arruga en la reparación considere la aplicación de un parche de papel tisú japonés de reparación. Si la reparación no está alineada adecuadamente, humedezca la zona con agua para reblandecer la reparación y hágala de nuevo.

3. Cómo reparar desgarros usando pasta de metilcelulosa con papel tisú japonés de reparación

El papel tisú japonés le da fortaleza a la reparación. Se utiliza cuando el desgarro no tiene bordes anchos que se solapen y, por ello, necesita refuerzo.

Lea HERRAMIENTAS Y TÉCNICAS DE REPARACIÓN DE LIBROS para las instrucciones de cómo rasgar y aplicar la pasta al papel japonés. Escoja el mejor método para rasgar y aplicar el engrudo antes de empezar la reparación.

Aplique el engrudo en el papel tisú y luego levante el papel usando una aguja, micro espátula o pinzas finas. Cuidadosamente ponga el papel japonés sobre el desgarro. Si el desgarro está en el borde de la hoja extienda el papel tisú japonés 1 cm. más allá del borde del papel. Esta extensión se puede doblar o recortar cuando se termine la reparación.

Puede ser difícil trabajar con un pedazo de papel Japonés que sea mayor de 8 cm. Trate de reparar los desgarros largos con varios pedazos cortos y sobrepuestos de papel tisú. Aunque sea tentador use un pedazo largo de papel tisú, es mucho más difícil de controlar y la reparación final puede parecer mal hecha. 

Una vez que el papel tisú con adhesivo se sitúe sobre el desgarro, cúbrala con un pedazo de material no adherente y presione los bordes con una plegadera. Recuerde que es mejor trabajar de la base de la reparación hacia el borde exterior de la hoja.

Limpie cualquier exceso de adhesivo que se haya salido de la reparación. Si hay exceso, utilice menos la próxima vez. Cuando todo el desgarro haya sido reparado, cúbralo con material no adhesivo y papel secante, y luego ponga un peso. Recuerde, si la reparación no se seca bajo peso, el papel puede alabearse o enroscarse. Cuando la reparación esté seca, enrosque el papel alrededor de la reparación para asegurarse que los bordes estén bien pegados.

Si hay bordes sueltos, aplique más pasta y seque bajo un peso. Si la hoja se arruga en la reparación considere la aplicación de otro parche de papel tisú japonés de reparación en el otro lado de la hoja.

5. Cómo reparar cortes en el papel

Un corte en el papel cercena completamente las fibras del mismo, de modo que no tiene borde superior e inferior ni un borde deshilachado. Los cortes en el papel tienen que ser reparados con papel tisú o cinta para reparación de documentos. Como el corte no tiene soporte, puede ser mejor poner papel tisú en ambos lados del corte o envolver papel tisú o cinta alrededor de la parte posterior para reforzar la reparación. Siga las instrucciones de CÓMO APLICAR UN PARCHE DE PAPEL TISÚ JAPONÉS CON PASTA DE METILCELULOSA O CÓMO APLICAR CINTA PARA REPARACIONES. 


6. Cómo reparar pérdidas de papel

No es muy común encontrar huecos en medio de una hoja, pero puede suceder. A pesar de que la impresión no se puede recuperar, el papel se debe reparar para prevenir daños mayores. Escoja dos pliegos de papel tisú japonés de un grosor similar al de la hoja que va a ser reparada.

Rasgue dos pedazos de papel japonés para cubrir el hueco usando las técnicas descritas en CÓMO RASGARA UN PARCHE DE PAPEL TISÚ JAPONÉS SOBRE LA SUPERFICIE DAÑADA. Proteja el cuerpo del libro con material no adherente en cada lado de la hoja dañada.

Aplique pasta a un parche de papel japonés, ubíquelo en la posición correcta sobre la hoja y trabaje sobre los bordes para acomodarlos. Aplique pasta al trozo más pequeño y ubíquelo en su sitio trabajando los bordes con una plegadera. Cubra con material no adherente y papel secante. Seque bajo pesas. 


Después de que la reparación se seque, enrosque el papel en la zona de la reparación para asegurarse de que todos los bordes estén bien pegados. Si los bordes están sueltos, añada algo más de pasta y seque bajo peso, y luego pruebe de nuevo. 

FUENTES:
http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1851-17402010000100006
http://biblioteca.ucm.es/foa/doc16790.pdf
IMÁGENES:
http://laboratoriodelfondoantiguo.blogspot.com.ar/2011_02_01_archive.html

Publicado por Raquel Gail para Archivo Histórico de la Escuela Normal de Quilmes "Silvia Manuela Gorleri" el 11/29/2016 04:36:00 p. m.